La disgrafía es una dificultad específica del aprendizaje que afecta la capacidad de escribir de manera clara, legible y organizada, sin estar relacionada con problemas intelectuales o educativos.
Las personas con disgrafía pueden experimentar dificultades en la coordinación motora fina, lo que afecta la formación de letras, la ortografía y la estructuración de textos.
Este trastorno puede manifestarse en niños en edad escolar, pero también en adolescentes y adultos. Con una intervención adecuada, que combine estrategias psicopedagógicas y ejercicios de motricidad fina, es posible mejorar significativamente la escritura.

